Deliciosas gambas a la gabardina: receta fácil y sabrosa
Saborea la irresistible fusión de crujiente y suculento con nuestras deliciosas gambas a la gabardina: una receta fácil que deleitará tu paladar.
Las gambas a la gabardina son un plato muy popular en España y son muy fáciles de preparar en casa. Ya sea como aperitivo, entrante o plato principal acompañadas de una ensalada fresca, estas gambas siempre son una delicia. Pero, ¿sabías que esta receta tiene una historia curiosa detrás?
La historia detrás de las gambas a la gabardina
La receta de las gambas a la gabardina surgió en la gastronomía española en el siglo XIX. Se dice que fue inspirada en la protección que brinda una gabardina al cuerpo. Al igual que una gabardina protege del frío y la lluvia, el rebozado de huevo y harina protege las gambas durante la fritura.
Receta de las gambas a la gabardina
Para preparar las gambas a la gabardina necesitarás los siguientes ingredientes:
- Gambas peladas
- Huevo batido
- Harina
- Aceite para freír
- Sal
El primer paso es cocer las gambas correctamente. Para ello, te recomiendo cocinar las gambas medianas por 2-3 minutos y las grandes por 4-5 minutos en agua hirviendo con sal y hojas de laurel. Es importante no cocinarlas demasiado para que no queden duras y mantengan su sabor natural. Una vez que cambian de color a rosa brillante o rojizo, están listas para ser retiradas del fuego.
A continuación, vamos a preparar el rebozado para las gambas. En un recipiente, bate un huevo y añade harina poco a poco hasta obtener una mezcla espesa. Asegúrate de que las gambas estén completamente cubiertas con esta mezcla antes de freírlas.
Calienta el aceite en una sartén a fuego medio-alto. Una vez que el aceite esté caliente, añade las gambas con cuidado y fríelas hasta que estén doradas y crujientes. Recuerda que el aceite debe estar lo suficientemente caliente para que las gambas se cocinen rápidamente y no absorban demasiado aceite.
Una vez que las gambas estén listas, retíralas del aceite y colócalas sobre papel absorbente para eliminar el exceso de grasa. Ahora sí, ¡ya puedes disfrutar de unas deliciosas gambas a la gabardina!
Opciones más saludables
Si prefieres una versión más saludable de las gambas a la gabardina, puedes cocinarlas a la parrilla en lugar de freírlas. Simplemente sazona las gambas con sal y pimienta, y ásalas en una parrilla caliente durante unos minutos por cada lado. Obtendrás unas gambas jugosas y llenas de sabor, pero con menos grasa.
Cocer gambas congeladas
Si tienes gambas congeladas, es importante descongelarlas previamente antes de cocinarlas. Puedes hacerlo colocándolas en la nevera durante varias horas o bajo agua fría durante unos minutos. Una vez descongeladas, limpia las gambas y cocínalas en agua hirviendo con sal y hojas de laurel durante 2-3 minutos. Asegúrate de que estén en el punto óptimo de cocción antes de servirlas, con un color rosado intenso y una textura firme pero no gomosa.
Las gambas a la gabardina son un plato delicioso y fácil de preparar en casa. Ya sea que las frías o las cocines a la parrilla, siempre serán una opción sabrosa. Recuerda que el aceite debe estar caliente y las gambas deben estar completamente cubiertas con la mezcla de harina y huevo antes de freírlas para obtener gambas a la gabardina perfectas. ¡Anímate a probar esta receta y disfrutar de un plato crujiente y delicioso en casa!